Me manifiesto, memanifiesto... y el día 11 seré una ttantta en ese pezado de mar.
Quid pro quo, doctor. Tú me lo dices y yo te lo digo.
¿Han parado ya de chillar los corderos?
Amenazas que no te hacen vulnerable, se partirá el martillo en los inexistentes dientes de leche. De mala leche. Que buena ya has sido. Dientes que han estallado de tanto apretarlos. Así que mantenerse al margen, aviso a navegantes. Lejos de la pared. En mi muro, que ni es de lamentaciones ni pretende serlo, si acaso de lametazos, solo se desNuka quién yo quiera. Mientras tanto saltaremos ese y otros muchos, tantos como haya que derribar. Que antes que nosotras otras lo hicieron. Rigoberta!!! (jeje. ¿Cómo era aquella historia?) y otras como Simone de beuvair, que nacieron un día como hoy.
DesNuka estoy un rato. Aunque gano más desnuda. En tiempo y espacio. Claro. Golpeo la pared, ya sin dejar sangre. Solo dibujar el mar de nuevo a golpes. A golpes de cintura, mucho mejor. Entre la espada y la pared. Yo. Entre tu pecho y mi espalda. Me reinvento o reviento. Ni el consuelo de golpear el suelo para volver a despegar, voy coger vuelo a mi cielo, lejos del tuyo. Y yo que sé.
Coño, ¿ se supone que yo te iba a alegrar el día? necesito despejar la nuka.
Gora las hijas bastardas!
