en fin... y yo en el pueblo regando la huerta... me consuela pensar en que los tomates están jugosos, las acelgas exuberantemente tersas, las zanahorias en en su hueco, y las cebollas tiernas. La cosecha de calabacines y pepinos creo que ha llegado a su fin... otra vez será.
No pasa nada, alguna vez todxs nos venimos abajo...