En mi singladura por los bares de Bilbo, me tropiezo de morros con el Umore ona, casi no lo reconozco, es más, casi ni entro, ya que por fuera parece un bar de txunta txunta o algo asi, pero me pico la curiosidad...
Está muy cambiado, pero se sigue respirando rock y buen ambiente, y lo mejor de todo, la deseo-decoración: